Una gran oportunidad

Resumen y preguntas de discusión

Pasajes principales

Daniel 9:1-3 NVI
^1-2 «Corría el primer año del reinado de Darío hijo de Asuero,^[a] un medo que llegó a ser rey de los babilonios, cuando yo, Daniel, logré entender ese pasaje de las Escrituras donde el Señor le comunicó al profeta Jeremías que la desolación de Jerusalén duraría setenta años. ³ Entonces me puse a orar y a dirigir mis súplicas al Señor mi Dios. Además de orar, ayuné y me vestí de luto y me senté sobre cenizas.

Isaías 56:7 NVI
⁷ los llevaré a mi monte santo; ¡los llenaré de alegría en mi casa de oración! Aceptaré los holocaustos y sacrificios que ofrezcan sobre mi altar, porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos».

Puntos principales

Hace unos días estaba trabajando en mi computadora y mientras trabajaba escuchaba música, en Youtube. De pronto un anuncio se activó y escuché la voz de un hombre que decía: ¡Por fin se nos presenta una gran oportunidad! tenemos tiempo para re-inventarnos, para evaluarnos.

Cuando escuché este anuncio, algo se activó dentro de mi. Estamos teniendo más tiempo del que teníamos meses atrás. Es importante comprender el momento histórico que vivimos y la gran oportunidad que tenemos de dedicar este tiempo para tener comunión con Dios. Estamos viviendo un tiempo donde tenemos un descanso de muchas cosas que antes nos aceleraban, pero ahora esas cosas están pausadas y es buen momento de poner todo en perspectiva y hacer crecer nuestra vida natural y espiritual. De esta manera nos prepararemos para lo que vendrá más adelante.

En el libro de Isaías se proclama: ¡Mi casa será llamada casa de oración! Y en este tiempo histórico la iglesia está entendiendo que la iglesia no son los edificios, la iglesia somos nosotros y la iglesia está activa en cada hogar. Por eso la importancia de tomar este tiempo para nutrir la parte espiritual de nuestras vidas, hay algo que Dios quiere depositar en este tiempo de cuarentena.

La Biblia ejemplifica a través de la vida de Daniel en un contexto parecido al que hoy vivimos, un momento histórico para su nación. Es increíble cómo Daniel fue tan activo para entender la temporada que se estaba viviendo. Daniel perseveró en oración y a él se le fue dada mucha influencia y autoridad en medio de una nación que no era la suya. Dios le dio mucha gracia, pero no fue casualidad, Daniel se llenaba constantemente a través de la oración. 
De la misma manera, hoy tu y yo estamos en medio de una situación complicada y debemos comenzar a ver la oración, no como un adorno para los cristianos, sino como una demanda para estar continuamente en la presencia de Dios. Siempre que estemos en oración estaremos conectados con el corazón de Dios. Solo a través de la oración lograremos tener una repuesta en torno a todo lo que esta sucediendo por causa de la pandemia.

Quiero compartir rápidamente dos principios contigo que podemos ver en Daniel 9:1-3 y poner en práctica en este tiempo donde tenemos una gran oportunidad:

1- Orar en todo tiempo hasta conocer los planes de Dios.
Daniel estaba en un tiempo de comunión, estaba leyendo la palabra, se mantenía constantemente orando hasta conocer los planes de Dios, aún en medio de sus circunstancias. En este tiempo nuestra postura debe ser la misma, hacer de la oración una prioridad en nuestra agenda, buscar a Dios para conocer cuáles son sus planes para este tiempo.
Si queremos tener una comprensión clara de lo que Dios está hablando, de sus promesas para este tiempo, tenemos que buscarlo en oración con tenacidad y vitalidad.

2- Orar fervientemente aferrándonos a la palabra de Dios.
Daniel sabía que para que su oración fuera efectiva tenía que estar unido al conocimiento de la palabra de Dios, ¿Qué es lo que Dios dijo? ¿Qué es lo que Dios había planeado?
Al conocer el plan de Dios, Daniel unió todo su ser para clamar por ese plan. Daniel se encontró con que el plan de Dios para Israel no era tenerlo en cautividad, sino poder librarlos de esa cautividad. El plan de Dios era bendecirlos.

Nosotros debemos entrar en un tiempo de oración vigorosa y ferviente. Tenemos que aprovechar la gran oportunidad y tomar una posición activa para orar, ayunar, levantar vigilias y buscar la presencia de Dios. Como iglesia tenemos la responsabilidad de estar atentos esperando las promesas de Dios que hemos recibido a través de Cristo Jesús.

CONÓCEME MEJOR. 

• Recuerda al menos una oración que Dios contestó en tu vida. Reflexionemos acerca de que Dios quiere responder nuestras oraciones.
• ¿Qué cosas estas haciendo durante este tiempo para nutrirte tanto natural como espiritualmente?

PROFUNDICEMOS EN EL MENSAJE

• Asi como este distanciamiento social nos ha complicado cosas en nuestra vida, también ha facilitado otras ¿Qué cosas se te han facilitado en este tiempo?
• Reflexionemos sobre Daniel. El profeta fue esclavo y llevado a Babilonia, se mantuvo fiel a Dios, sirvió bajo el mandato de muchos reyes, hasta llegó a ser gobernador de Babilonia, sin duda era un hombre ocupado ¿Por qué a veces nos cuesta organizar nuestro tiempo para hacer nuestras tareas naturales pero también perseverar con devoción buscando a Dios? ¿Crees que realmente la falta de tiempo es una excusa?

APLIQUEMOS EL MENSAJE

• Aparta un tiempo intencional de oración durante la semana donde tu única petición sea: Dios pon en mi hambre y fervor para buscarte en oración.